Parece que Cristiano Ronaldo no tendrá sencillo el asunto de salir de fiesta en España. Su nuevo equipo, el Real Madrid, que pagó casi 100 millones de dólares por su fichaje, le prohibió por contrato las juegas nocturnas. Y cuando de vez en cuando “se escapa de fiesta”, allí se encuentra con los fotógrafos o algo peor, como su furiosa ex novia, Nereida Gallardo.
Y así fue cuando el pasado sábado Cristiano Ronaldo se encontraba en la conocida sala de fiestas Mood Beach, situada en Port Portals, en Mallorca. Lo que estaba previsto ser una cena, se terminó convirtiendo en una fiesta hasta altas horas de la madrugada. En lo más álgido de la fiesta fue cuando Nereida Gallardo se presentó para montar “la escenita”.
Nereida Gallardo se apostó a la puerta de la discoteca, rodeada por una nube de fotógrafos de la prensa del corazón. Ante sus gritos y exigencias, la dirección del local aconsejó a Cristiano Ronaldo que saliera del recinto por la puerta trasera, para así evitar a los fotógrafos. Pero con tan mala suerte que hasta allí, y en el preciso momento en el que Cristiano Ronaldo salía, se presentó Nereida Gallardo, que corrió hacia él. Entonces entraron en juego los guardaespaldas del futbolista que detuvieron su avance. Pero el esperpéntico espectáculo no terminó ahí, ya que después de que Cristiano entrara en el vehículo de gran cilindrada que utiliza para sus desplazamientos por la isla, Nereida se lanzó literalmente sobre el capó profiriendo toda clase de gritos.
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